Cálidos compartir de la Noche Vieja y el Nuevo Año

El primer día del año estuve de visita en Guigue, estado Carabobo. la razón fue para hacerle un favor que me solicitara mi tio Freddy en ocasión de ir a buscar un hijo suyo - mi primo José Andrés- y llevarlo a La Isabelica, puesto que en la actualidad esta convaleciente en virtud de que en dias pasados sufrió un fuerte accidente donde casi pierde la vida en una moto, pero la gracia de Dios fue mayor y hoy se recupera de manera satisfactoria.

Es entonces que, bien tempranito el primero de enero tomé rumbo a Valencia desde Puerto Cabello, lugar donde mi familia y yo fuimos invitados por mi tia Iris para recibir el año nuevo en un hogar donde por muchos años fui criado con temple, responsabilidad y carácter del bueno, junto con mi extinta abuela Susana y por supuesto con mis queridas hemanas.

Asi pues que, disfrutando del buen momento que nos deparaba el 31 en la noche, recibimos el nuevo año entre risas y abrazos tantos, dando paso a larguisimos brindis solicitando sobre todo salud y luego el atarrugamiento de las benditas uvas del tiempo, tratando de hilvanar entre uno que otro poema, las letras de Andres Eloy pero que los gritos dicharacheros de mis hijos, sobrinas y sobrinos espantaban sin aspavientos la musa y finalmente la comida aplacó cualquier intento de trova cumanes-madrileña.

Si bien hace un par de años la cuestion fue bien dura en la fecha mencionada, pudimos celebrar y sacarle el mejor provecho a la reunión. No dejamos de recordar los que se fueron pero lo hicimos con el recuerdo de los mejores momentos y pudimos afrontarlo (esto es posible con el empuje de tantos chamos inquietos).

Recordando el compromiso adquirido con antelación, temprano agarre para Valencia y cerca de las ocho de la mañana, estaba ya en el sector 11 de la Isabelica con ánimos de tomar desprevenido al viejo Freddy, pero ya estaba despierto y esperandome, a pesar de que le dije que llegaria a eso del mediodia, si la pea me dejaba.

No obstante, a sabienda que todos en la familia somos malos beodos (un par de cervezas son suficientes para embucharnos) sabia que lo mas probable era que me presentara temprano en su casa y así fue. Pero lo mejor estaba por verse. Tenia un buen tiempo que no veía a mi madrina y el periplo hacia Guigue fue motivo para disfrutar y rememorar momentos inolvidables junto a ella y a pesar de que el dia se nos fue volando, el viaje bien valio la pena. Aqui les dejo algunas fotografias de esos buenos momentos

Quiero señalar que por razones cotidianas, las visitas a nuestros familiares se hacen cada vez más distantes. Cuando nos damos cuenta empezamos a contar los años desde la última vez que vemos a nuestros parientes, pero es un honor hacer un alto y volver a rescatarlos. Obviamente que la familia Bloguers forma parte de este sentimiento y espero de todo corazón que este año nos veamos más a menudo. Feliz año nuevo 2010 queridos amigos